Primera parada de la cuarta generación de internet móvil

A partir de hoy comienza de forma oficial la andadura de la cuarta generación de internet móvil en España. Hasta ahora había sido una cosa de laboratorio, quedando en manos de un puñado de grandes empresas repartidas sobre todo entre Madrid y Barcelona. En una maniobra casi sorpresiva, Vodafone anunció este mismo lunes que a partir de esta semana comenzaba el despliegue 'comercial' de esta tecnología en siete ciudades españolas. En esta primera oleada, además de la capital y la Ciudad Condal, Málaga, Palma de Mallorca, Bilbao, Sevilla y Valencia se 'conectarán' permitiendo velocidades de descarga de entre 30 y 100 megas por segundo. La compañía anunció que en principio el 55% del mapa de estas urbes tendrían cobertura 4G algo que podría avanzar hasta un 85% hacia finales del mes de agosto, que se reducirá en interiores hasta el 60%.
Que una conexión móvil sea capaz de 'rodar' a esos niveles era en España una mera utopía para el usuario teniendo en cuenta que hasta hace poco solo un puñado de afortunados lograban alcanzar los cinco o seis megas de descarga, algo que apenas daba para poder ver un vídeo de baja calidad en un dispositivo móvil. Ahora, los 'smartphones' y las tabletas podrán gozar de unos guarismos que en nuestro país eran competencia exclusiva de la fibra óptica, en contadas ocasiones y localizaciones geográficas.
Las posibilidades que se abren ahora conforman un más que interesante abanico. Por ejemplo, la descarga de una pista de MP3 tardaría 0,3 segundos, lo que viene a ser un abrir y cerrar de ojos en el sentido más estricto de la expresión. Realizar una videoconferencia desde el móvil, algo que ahora puede resultar un esfuerzo que ponga a prueba hasta la paciencia más hercúlea, será un simple trámite. Aplicaciones como Skype, Line y demás del género VoIP tendrán un ancho de banda más que suficiente. Por no hablar de la posibilidad de visualizar películas en 'streaming'.
«El desarrollo de las redes LTE acabará por dar la posibilidad de ver contenidos en alta definición sin problemas desde dispositivos móviles», asegura Sergio Ríos, experto en tecnología y profesor de la Universidad Pontificia en Madrid. «Este desembarco supone un salto cualitativo y cuantitativo en la velocidad de transmisión de datos con respecto a la situación actual», agrega Ríos. El estándar LTE es capaz de soportar movilidad hasta en altas velocidades. En un futuro se podrá viajar a 350 kilómetros por horas sin perder la conexión. Lo que se traduce en que una persona que viaje en el AVE no se quede sin acceso a la red en todo el trayecto.